El panorama volátil e impredecible de hoy requiere de un “agile leadership” centrado en el muy corto plazo.

Los Agile Coach se centran en formar líderes agile y lo hacen trabajando con ellos las tres principales capacidades del liderazgo ágil, que son: visión clara, toma de decisiones y rápida ejecución.

• VISIÓN CLARA

El líder ágil es consciente de la necesidad de proporcionar directrices y objetivos a través de una visión clara, ya que el cambio        permanente amenaza con hacer obsoleta cualquier estrategia temporal. Los líderes ágiles están permanentemente explorando, no solo a sus competidores, sino también todo lo que sucede en el mundo.

• TOMA DE DECISIONES

Los líderes ágiles toman decisiones a partir del análisis de datos, de evidencias y de la información contrastada. Necesitan utilizar las mejores fuentes, tecnologías y metodologías digitales, para que su proceso de toma de decisiones sea lo más corto posible. Estas herramientas les permiten, en caso de incertidumbre, apoyarse en su experiencia e intuición para tomar la decisión final.

• RÁPIDA EJECUCIÓN

Para moverse de forma rápida el líder ágil discriminará la velocidad sobre la perfección. Son conscientes de que en un entorno de cambio caracterizado por la alta incertidumbre, sin una rápida ejecución, no se consiguen los resultados deseados.

Estas tres capacidades esenciales del buen líder ágil están constantemente conectadas y superpuestas. No actúan de una forma lineal, ni una predomina sobre el resto. Las tres son importantes y necesarias para obtener resultados exitosos.